La semana pasada nos visitó la cantautora trasandina Violeta Castillo, autora de los EP’s Uno y Otro, que vienen a refrescar el panorama del pop argentino. Nuestro colaborador Roberto Doveris, el mismo que dirigió el video para su tema “Alfiler”, habló con ella tras sus intensos días en nuestro país.

Hace casi tres meses recibí en el correo electrónico un link que prometía contener una de las mejores canciones del 2011. Incrédulo hice click y comenzó a sonar “Mi cárcel”, que ya había cautivado a uno de mis amigos y que hasta el día de hoy me repito en casa, en el i-pod y en la ducha.

Se trata de uno de los hitazos que forman parte del dúo de EP’s Uno y Otro, lanzados por la trasandina Violeta Castillo, que en un formato sencillo y con melodías pegajosas terminan por sumergir al oyente en una densa atmósfera de nostalgia y de brumosa luminosidad. Tras finalizar sus dos fechas en Chile y grabar su primer videoclip en Santiago, nos cuenta sobre su experiencia en nuestro país.

¿Cómo surge la idea de componer tus propias canciones y qué otras experiencias has tenido en la música?

Después de terminar la secundaria, que cursé completa en la escuela de danzas, me di cuenta que me quedaba poco tiempo de bailarina, ya me estaba aburriendo en realidad. Así que una vez que empecé a escuchar canciones de Rosario Bléfari, Lucas Martí, Babasónicos, Francisco Bochatón, además de todo el rock nacional que escuché durante la secundaria, el interés por la música se despertó de golpe.

Empecé a tomar clases de canto y guitarra y solas vinieron las canciones, primero una y luego otras. En 2008 tuve dos proyectos paralelos, la banda Castillo Violeta y el dúo romántico acústico de covers de hits de FM, Angélica y Tomás. El 2009 me hice solista.

Algo que me llamó la atención cuando te escuché por primera vez fue tu capacidad para construir melodías adictivas, pero jamás predecibles. Si bien has señalado que haces pop, no respetas la estructura clásica del mainstream. De hecho fue bastante novedoso para mí hacer un video de un tema que apenas dura dos minutos, y que se divide en dos estrofas, la primera mitad, y un segmento musical en su segunda parte. ¿Cómo es que llegas a delimitar este tipo de formato para tus canciones, nunca probaste repetir versos y construir coros?

En realidad la primer canción que hice, hace como tres años viajando en una micro, era larguísima, cuando llegué a mi casa la escribí para no olvidarme la letra y recuerdo que ocupé tres hojas de un cuaderno. Tenía varias estrofas y repetía varias veces el estribillo, se llamaba “La planta”. Cuando se la mostré a mi amigo Juan Ignacio Serrano, también conocido como Juanito el Cantor, quien por entonces era mi profe de guitarra, me dio un consejo que me sirvió para el resto de mis composiciones, me dijo: tratá de no decir dos veces lo mismo, evitá la redundancia.

Al principio, como no sabía tocar la guitarra ni ningún instrumento de acompañamiento, componía solamente a partir de la melodía de la voz, tratando de hacer encajar las palabras dentro de una línea melódica, una vez que empecé a acompañarme de guitarra, fui encontrando una forma más sintética de componer, es más fácil ver el resultado cuando se compone la armonía y la melodía a la vez. Por otro lado, me gusta el hecho de dejar partes sin explicar, osea, que se entienda de qué hablo o qué historia se cuenta, pero no ser tan específica, para dejar algo librado a la imaginación de los que escuchan.

¿En qué te inspiras? ¿Cuáles son tus referentes más cercanos?

Creo que no busco referentes mientras compongo, pero sí me pasa que mis propias canciones me suenan parecidas a otras que ya existen, digo “este tema es re 107 faunos” por ejemplo, es algo inevitable que suceda porque me la paso escuchando música y viendo bandas en vivo, y me gusta que así sea porque no deja de ser algo nuevo y único, no quiero desesperarme por ser diferente a todo, ya soy diferente, no hace falta hacer algo inentendible y ultra vanguardista para ser original.

Es verdad, convencional no eres; en el videoclip tú decidiste no hacer lipsing. ¿Alguna razón en particular?

Por un lado, el hecho de no haberlo hecho nunca me tenía un poco preocupada, cuando canto me transformo y pongo unas caras muy graciosas, lo sé porque me he visto en videos o fotos cantando y es tremendo. Por otro lado, no tan superfluo, me gustaba la idea de que fuera más cinematográfico que el común de los videos, entonces me parecía que si hacía lipsing se iba a cortar un poco el clima de trailer que se logró, me gusta hacer ese tipo de divisiones, si bien es Violeta la chica del video, podría ser cualquier otra persona que va a nadar a un club.

En otros medios contaste tu relación con Chile. Sabemos que viviste acá tus primeros siete años de vida y que tienes una hermana pequeña por parte de tu padre ¿Qué cambios, desde tu perspectiva, notas del Chile actual respecto al de tu infancia?

Era muy chica cuando vivía en Chile, así que los recuerdos que tengo no son muy confiables, son más las cosas que sé porque me contaron que las que recuerdo, de hecho. Pero indudablemente es un buen momento para Chile, los estudiantes se están haciendo escuchar alrededor del mundo, eso es muy importante, tienen un presidente nefasto y lo saben, ya nadie le cree nada parece, al menos eso dicen las encuestas. Y en lo musical ni hablar, son bacanes, y tienen todo el empuje.

Y en Argentina, ¿cómo percibes la acogida del público?

Recibo muy seguido mensajes positivos de gente que me escucha, muchos de México gracias a que reseñaron mis eps en Club Fonograma y me entrevistaron en el programa Mercado Negro de la Radio Ibero 90.9. También de Colombia, por haber salido en el compi del Amarillo, de Chile, Brasil y también de acá. Creo que se debe también a que estoy mucho tiempo en la compu, en todas las redes sociales, creo que es la forma de decir presente y hacerse conocido hoy en día, aún sin discos editados físicamente.

Con respecto a la red, Uno y Otro tienen distribución online. ¿Qué opinión tienes de las nuevas plataformas? 

Lo de la edición virtual me parece que ya está fuera de discusión, no puede no estar online, al menos para escuchar. Ahora, lo de la edición física es una duda que tengo, editar, no editar. Por un lado no me parece necesario para la cantidad de discos que se vendería, y además es mucha plata que hay que poner en eso. Pero por otro lado me interesa que se pueda apreciar el arte -que diseñó Alejo Muñoz uniendo una foto de Catalina Bartolomé y un cuadro de mi hermana, Aurora Castillo- de manera tangible.

Pero haría vinilo directamente si es por eso, de hecho lo esoty pensando, así que en una de esas salen. Por ahora se pueden conseguir tanto comprándolos en Bandcamp en una excelente calidad de audio por $2.50 dólares cada uno, o en calidad mp3 a cambio de un tweet entrando a http://loscaracteres.tumblr.com/unoyotro

Cuando nos conocimos en Argentina hubo un día que nos pusimos a cantar Javiera Mena y eras re fan de ella. Ahora compartiste escenario con Moreno y Dadalú. ¿Entraste en contacto con otros músicos, cuáles?

Sí, soy muy fan de Javiera, es máxima. Además de Moreno, que resultó una banda de gente muy piola y buena onda, tuve el el placer de conocer en persona a Dadalú y compartir fecha con ella y su banda, un grupo humano hermoso y muy divertido. Con Dada venía hablando por chat hace bastante, pero en persona superó mis expextativas, es amorosa. También tuve la suerte de conocer a Fakuta. Desde que salió su disco lo escucho sin parar, estoy fascinada con su pop fino y dulce. Se armó una linda amistad con Dada y Fakuta.

¿Te interesa nuestra escena local? ¿Cómo la ves desde fuera?

Me interesa mucho la escena chilena, de hecho por eso me entusiasmaba tanto la idea de ir a compartir y vivir desde adentro la cuestión, para que se genere un intercambio, que yo vaya, que ellas vengan, y así, ir ampliando el espectro. Creo que a pesar de la distancia, estamos en momentos muy parecidos, si bien ellas son más grandes y tienen más experiencia, las tres estamos con nuestros lanzamientos solistas, al igual que Luciana Tagliapietra, hay una conexión ahí, que hay que seguir profundizando.

Tocaste en espacios pequeños y para un público reducido. ¿Cómo percibes la acogida del público que fue a verte en tus dos fechas? ¿Nos podrías contar cómo fue cada tocata y cómo la pasaste?

Las dos fechas fueron en formato acústico sola, guitarra y voz. Un set que tenía un poco abandonado, pero que usé durante un año entero antes de grabar Uno y Otro. Fueron shows bastante íntimos, me sentí muy cómoda y bien recibida, y tuve buenos comentarios por parte de gente que ya había escuchado los EPs y tenía ganas de verme en vivo.

En Buenos Aires suelo tocar acompañada de una banda: batería, bajo, guitarra eléctrica y guitarra acústica. Así que espero que la próxima vez que vaya a Chile, que va a ser pronto, marzo a más tardar, pueda ir con ellos porque esta vez se quedaron con las ganas. En ambas fechas hubo fiesta con Djs luego de la tocata, la del sábado con Rozenvaig y luego con Tonossepia fue bacán, bailamos mucho, en el tmblr que hacemos con mi novio Lucas hicimos un resumen del viaje que fue todo alegría y emoción.

Fotos por Roberto Doveris