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Por: Matt Fink
Traducción: Carmen Duarte
Gentileza de Under The Radar Magazine

A lo más un cumplido al revés: a los discos que se les califica de no-a-la-primera son una escarapela para los melómanos serios y simplemente demasiado para el resto. Por regla, son discos que desilusionan a la gente al principio, usualmente creados por artistas que están desafiando las expectativas al entregar algo que es justamente lo que los auditores no quieren escuchar en un ese momento. Pero inherente a la designación de una promesa, ese álbum entregará sorpresas sólo si le das el tiempo suficiente. Low de David Bowie, Nashville Skyline de Bob Dylan o el Wowee Zowee de Pavement: álbumes potencialmente amenazantes a la primera escucha pero cuyos encantos los empujaron a la categoría de grandes discos a secas. Pero esas son las historias del éxito. La mayoría de los no-a-la-primera simplemente se desvanecen en la oscuridad y terminan en los canastos de ofertas. Para bien o para mal, el nuevo disco de Spoon es un no-a-la-primera.

“Parece que siempre me he sentido así, pero eso es lo que la gente está diciendo de este disco???, dice el vocalista/guitarrista de Spoon, Britt Daniel, sonando inseguro sobre si eso del rótulo de no-a-la-primera es una bendición o una maldición. “Me cuesta definirlo, porque yo tengo una concepción totalmente distinta a la de alguien que no trabajó en él. Generalmente no entiendo qué está diciendo la gente de los discos que dicen que son no-a-la-primera. A mi me gustan los discos no-a-la-primera. Pasa el tiempo y encuentras nuevas cosas que te gustan???.

Llamado Ga Ga Ga Ga Ga, el sexto álbum de Spoon no es un compendio de himnos listos para la radio ni tampoco un resguardo en el rock desvestido de su disco revelación Kill the Moonlight. Y a pesar que podrían haber sido perdonados por capitalizar el momentum que tuvieron por tener algunas de sus canciones apareciendo en series en la tele, bandas sonoras y comerciales, no hay en ellos un evidente profitar de esos momentos. En vez de eso, el cuarteto de Austin entregó su placa de estudio más intensiva; el sonido de una banda amontonando diez canciones y 36 minutos llenos de cada idea extraña que pudiese ocurrírseles y tocándolas con una precisión desordenada, sea hurgando a través del piano exhibicionistamente pop de ‘Don’t make me a target’ o la aplaude-conmigo cargada a la trompeta de ‘The underdog’ y la fanfarronamente Motown ‘You got yr. cherry bomb’. Pero a pesar de las usuales dosis de excelentes melodías y encantos sutiles, es un disco sin un punto focal claro o un argumento, un trabajo de artesanía cuyas sutilezas sólo se despliegan en constantes escuchas. No hay un single obvio. Es un no-a-la-primera.

“Queríamos que sonara como si tuviera bordes ásperos??? dice Daniel, refiriéndose al encanto espontáneo del disco. “Yo sólo quería que sonora como lo que estaba grabado en cinta. Termino sonando bien diferente de lo que había realmente en las cintas, en las que había un montón de ruido hermoso y tibio, con pequeños accidentes, gente conversando antes de las tomas y notas flojas que ocurrieron durante la grabación, lo que pensabas que nadie podía escuchar. Teníamos la intención de dejar todo eso. Creo que el resultado en el disco es más vivaz, un poco más astillado???.

“Nunca nos ha gustado borrar cosas???, dice riéndose el baterista Jim Eno. “Hay una tendencia al hueveo en el estudio, a pasarlo bien y hacer bromas. Mucho de eso quedó grabado. Entonces, cuando partimos con las mezclas, escuchamos eso todo el tiempo, y algunas de las cosas están increíblemente mapeadas y otras son como aleatorias. Como que aterrizaron en cualquier lugar. Como una tos. No creo que haya sido un esfuerzo conciente hacer un disco como este, pero probablemente nos quedamos con un montón de cosas???.

Mucho más intencionado (aunque no más obvio) es el don de Daniel para diestros juegos de palabras y vívidos bocetos de personajes, algo que aparece en la quieta añoranza de ‘The Ghost of You Lingers’ y la amenazante confrontación de ‘Eddie’s Ragga’. Notoriamente compungido cuando llega la hora de discutir sus propias letras, es tímido cuando se le pregunta sobre las temáticas que aparecen en el disco. “¿Temáticas? Bueno… corazones rotos y política???, dice después de una larga pausa. “Quiero que los auditores les den un sentido o tengan sus propias impresiones antes que yo tenga que explicárselas. Creo que eso significa más para ti si pintas tu propio cuadro. Hay dos canciones en el disco que siempre fueron claramente sobre George W. Bush???, se permite “pero encuentro que un montón de gente no entiende eso, y está bien. No me gustaría escribir una canción que no tuviera un misterio o con la que tienes que estar de acuerdo o no estar de acuerdo. Me viene a la cabeza Julian Cope cuando hizo Peggy Suicide; ese disco era casi entero sobre el medioambiente, protegerlo y la madre tierra pudriéndose, o lo que sea. Pero puedes lanzárselos a la cabeza a los auditores…??? dice reculando. “Esa no es la manera en que yo quiero hacerlo.???

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Más espontáneos son los orígenes del título del disco, la hebra bizarra de sonidos monosilábicos. Surgió de la tendencia ocasional de Daniel de ocupar líneas vocales de reemplazo mientras terminaba la música de una canción. “Era el título de ensayo para ‘The Ghost of You Lingers’???, explica. “Cuando recién partimos trabajando en esa canción, no teníamos letras y la canción sonaba como ‘Ga Ga Ga Ga Ga Ga Ga’, entonces le puse así. No sé si estábamos siendo pendejos, pero lo pasamos increíble con eso; hablando de cuantas ga habían y diciendo ‘Ok, ahora vamos a trabajar en ‘Ga Ga Ga Ga Ga.’ Pero es una canción sobre extrañar a alguien, extrañarlo mucho, y cuando la canción tuvo el contenido y ese sentimiento, terminó mucho más melancólica y brumosa, pero no necesariamente fea. Cuando todo eso cambió y tuvimos las letras, quería un título que le fuera mejor. No quería el título ‘Ga Ga Ga Ga Ga ’ para algo que me afectaba emocionalmente. Mucha gente no se da cuenta de eso. Creen que es como hablan las guaguas o algo así. Pero considero que le están dando demasiadas vueltas. Es sólo un título de rock.???

De seguro, es un título que demanda tu atención, algo que puede ser difícil para una banda que se apoya tanto en la fuerza de su composición para cortar las convenciones de su acercamiento rockero atemporaloso (trata de definirlos con una descripción efectiva de su música y verás lo difícil que es). Nacidos antes de las sensaciones inmediatas de un día para otro de Internet y profusamente inmersos en la cultura de los vinilos, ganchos de guitarra y cintas análogas, Spoon siempre ha estado medio ritmo fuera del tempo de sus pares.

“Siento que mi estilo para cantar es más old school,??? admite Daniel, aunque parece erizarse con la sugerencia que su banda es anti-moderna. “Se siente como más del período en el cual yo crecí, donde los cantantes estaban cantando y gritando de una manera como cool. Un montón de músicos crecieron en un periodo donde Weezer fue su primer álbum??? continúa, haciendo una clara diferencia entre su estilo y los impíos vocalistas de nerd-rock que han llegado a dominar una era de bandas de rock. “Al mismo tiempo, la gente siempre dice ‘Bueno, nunca tienes coros en tus canciones.’ ‘My Mathematical Mind’ es un larga estrofa’. Escucho los dos lados. Nos llega esa mierda a montones desde los dos últimos discos ‘¿Por qué no escribes un coro? Debiera ir de la estrofa al coro’???.

Dicho eso, Spoon nunca será confundida con una banda de bar, pero es obvio que su estilo de música es inmune a tendencias, un estilo de art-pop abastecido por un motor mod-rock. Sin samples, sin computadores, sin trucos. ¿Entonces cómo logran resaltar de la manada y atraer la atención de los fans musicales modernos cuando el cetro casi siempre lo ganan personalidades gigantescas e híbridas variaciones estilísticas? “¿Qué hace resaltar a otras bandas si todo el mundo está haciendo eso???? dice Daniel, oponiéndose ante la sugerencia de que el acercamiento tradicional de su banda los pone en desventaja. “Si eres el tipo de banda que se apoya en un artificio, eres básicamente un pony de un solo truco. Sí, nosotros no tenemos un artificio, y no tenemos un laptop con el que toquemos, pero a cambio cada uno está tocando un millón de partes en cada canción. Todo el mundo está agarrando shakers o panderetas o cambiándose instrumentos, por lo que supongo que lo que estás viendo son músicos de verdad. Creo que eso todavía es emocionante para algunas personas???.

Evidentemente, tiene razón sobre eso, ya que Spoon se ha convertido en la banda rara que ha sido capaz de sobrevivir mientras que han aumentado sostenidamente su grupo de fanáticos de la manera tradicional: un disco y una ciudad a la vez. “Somos muy afortunados de que le gustemos a la gente y que nuestros fanáticos aumenten en un tiempo que la industria de la música se está frikeando???, dice Eno. “Nos está yendo bien y creo que mucho de eso tiene que ver con que Britt es un gran compositor. Fue divertido porque el 2004 estábamos de gira con esta banda grande, que básicamente se hicieron grandes por un hit de radio de su primer disco???, dejándote a ti que hagas la investigación de qué banda es. “Así que teníamos un día en Boston y estábamos tocando en el Middle East Downstairs, y vinieron como 400 o 500 personas un lunes en la noche. Simplemente fueron. Y estábamos conversando con la otra banda después del show y ellos dijeron ‘Eso es increíble. Ustedes nunca han tenido una canción en la radio y los vienen a ver 500 personas un lunes en Boston. ¿Cómo lo hacen?’ Y yo los miré y les dije ‘Hemos tocado en Boston 15 veces desde 1996. Así es como la mayoría de los grupos tratan de hacerlo.’ Y ellos no tenían conciencia de eso???.

Claramente su ejemplo prueba que no todas las bandas hacen crecer su fanaticada de esa manera probada en el tiempo, y hasta los mismos Spoon se han beneficiado de la cada vez más viable presencia del indie rock en el mercado. Y mientras su música no ha cambiado, sus seguidores ciertamente lo han hecho. “Hay muchas más chicas ahora, lo que a mi no me molesta??? dice Daniel riéndose. “Y creo que la gente ahora es más joven también. O quizá es de la misma edad y yo me volví más viejo, creo que por eso parecen más jóvenes. Y nos han tocado un poco más en la radio. Creo que así es como la gente más joven se entera de música. Hay muy pocas cosas que extraño de las que escuchaba cuando estaba en el colegio, muy pocas???, continúa , aparentemente teorizando sobre el gusto de los adolescentes. “Me acuerdo de escuchar ciertos discos y acordarme que me gustaba el primer lado o las dos últimas canciones, y ahora vuelvo a ese disco y lo vuelvo a escuchar después de diez años, y pienso ‘Estaba en lo cierto. Es una canción increíble.’???

A pesar de eso, sí han notado las dinámicas cambiantes de su audiencia. “Una cosa, hace un tiempo, antes que partiéramos haciendo ese tipo de cosas -bandas sonoras, comerciales o canciones en la tele- todo el mundo se sabía todas as canciones porque todos tenían todos los discos???. dice Eno, un veterano del indie rock que recién ahora puede mantenerse con las entradas que le genera Spoon. “Y fuimos a Australia. No me acuerdo qué gira, Kill the Moonlight me parece. Y ese disco tuvo rotación nacional en la radio. Entonces cuando fuimos para allá, ese era el único disco que habían escuchado, y sólo se sabían cinco canciones. Entonces era más como si tuviéramos un hit de radio, así era la audiencia. No es como si fuéramos súper famosos ni nada, eran 400 o 500 personas que nos conocían por la radio. Cuando tocábamos cosas más viejas, eran corteses pero no estaban súper entusiasmados, pero cuando tocabas algo nuevo, se volvían increíblemente locos. Supongo que en Estados Unidos ahora es un poco más como Australia. La gente conoce los discos más nuevos y los hits???.

Al final, Ga Ga Ga Ga Ga no es nada de eso, pero el aumentado énfasis de Spoon en el eclecticismo y experimentación de estudio les va asegurar que el disco se convierta en un clásico para quienes han permanecido el tiempo suficiente para pelar las capas de blue eyed soul, grooves funk del campo izquierdo y art-pop inesperado. “Creo que la gente escucha discos y si escuchan algo bueno, siguen escuchando??? dice Daniel, sin importarle mucho el debate. “Los discos eclécticos son buenos. Esos son mis favoritos, la verdad???, continúa, como si se defendiera. The White Album (The Beatles), Sign O’ Times (Prince), creo que los de ese tipo son buenos. Ahí es cuando más me intrigan los discos, cuando van a muchos lugares distintos”.