5fav: The Smiths

Segundo post de lo que hemos llamado 5fav, una instancia donde comentamos libremente los 5 temas más importantes (según nuestro sesgado criterio) de nuestras bandas favoritas. Esta vez es el turno de The Smiths.

Escrito en colaboración por Pablo Rozenzvaig y Rodrigo Ferrari.

No es casual que tras inaugurar esta noble sección con The Radio Dept., el recuento de las 5 canciones elegidas siga con The Smiths. Sin temor a exagerar, podríamos decir que los suecos son algo así como unos hijos naturales de los manchesterianos, no por nada comparten aquel patrón que Claudio, Gabriel y Jose Luis mencionaban acerca de esas bandas que pareciera que te cantaran a ti.

Esa sola idea de ponerse a pensar en qué significa que un grupo te cante a ti, nos hace pensar acerca de las razones de que algunos grupos entren en esa categoría y otros no.

Que una banda de rock te interprete depende demasiado de la edad que uno tenga. Puede haberte interpretado tal vez Bon Jovi en algún minuto de tu vida, pero probablemente deje de hacerlo cuando empiezas a crecer, de la misma forma que “Pesadilla 1” puede haberte dado miedo cuando tenías 12, pero que se vuelve inofensiva con los años.

Es acá donde Morrissey y compañía empiezan a marcar grandes diferencias. La primera de las razones es tal vez que volvemos a escuchar una y otra vez los discos y son atemporales como una película de Wilder. Son como Benjamin Button o Dorian Gray. Nosotros envejecemos pero siempre estarán los discos para hacernos sentir cada vez más viejos.

Por esta y otras razones elegir sólo cinco canciones de una banda que en 3 años y 4 discos hicieron lo que muchas otras han intentado (y siguen intentando) tras décadas de producciones y giras, no es tarea fácil. Más todavía cuando parte importante de esa producción se editó como single, incluyéndose sólo en algunos compilados, que muchas veces llegan a superar a los propios LP.

He acá un ejercicio sin mayores pretensiones de que estas son nuestras 5 favoritas. Puede que no sean las más conocidas, las más exitosas y ciertamente, no las mejores. Pero sí son esas cinco canciones que no puedes dejar de escucharlas enteras, una y otra vez, pensando que fueron escritas para ti, que Morrissey, Marr, Rourke y Joyce te espiaban desde la esquina, cuando te enamoraste, te rompieron el corazón, fuiste un idiota y la trataste mal; te sentiste miserable o recuerdas esa vez como si no hubiera posibilidad de repetirla.

“Reel around the fountain”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=_rdV7p3Qudc[/youtube]

Primer track de su disco debut The Smiths (Rough Trade, 1984), y la banda se tenía que hacer cargo de las críticas que apuntaban a supuestos mensajes de pedofilia y otras estupideces que suele inventar la prensa, porque, como le pasa a los grandes, cuando no los entienden los interpretan como quieren.

Hay gente que todavía no entiende el famoso “Keats and Yeats are on your side while Wilde is on mine”. Amor verdadero o simple lujuria, sea lo que haya detrás de estos versos, no dejan lugar a la indiferencia. Porque 15 minutos con esa persona, puede que para mucha gente no signifique nada, pero para uno sí.

“Heaven knows i’m miserable now”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=_m0EVSbhavk[/youtube]

Single editado en 1984 e incluido posteriormente en el compilado Hatful of Hollow (Rough Trade, 1984). ¿Quién no se ha hecho las mismas preguntas que Moz en esta canción? Para algunos, una de las mejores letras que existen. Para otros, una de las mejores líneas de bajo que se pueden encontrar en una canción.

Como sea, un grito musicalizado sobre lo miserable que podemos llegar a sentirnos cuando no somos correspondidos, cuando te esfuerzas tanto para quienes no tienen en sus planes tomarnos en cuenta. Cuando nadie te entiende y sólo te queda mirar al cielo y que Él te entienda no te sirve para absolutamente nada.

“There is a light that never goes out”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=sck89sTS6jc[/youtube]

Penúltima canción del disco The queen is dead (Rough Trade, 1986) y quizás uno de sus éxitos más conocidos. Una cursi declaración de amor, en la que estamos dispuestos a morir felices al lado de la otra persona. La popularidad de este track, reeditado como single en 1992, significó que muchos puristas la ninguneen por su exceso de hype. Sin embargo, y dejando a un lado a los ultramontanos, cabe decir que no sólo no es una canción cursi, sino que es tal vez el homenaje más directo de Morrissey a uno de sus más grandes ídolos: James Dean.

Lo que algunos creen que es un paseo en auto estilo tarjeta Village se equivocan demasiado, porque no sólo es una declaración de amor estilo “sin ti me muero”,  sino que es un pedido de auxilio a la que tal vez es la única persona que te puede salvar o sacarte del hoyo en el que te metiste.

Es la canción de alguien que no sólo está pidiendo que lo saquen del lugar en el que está, sino del que ya no tiene lugar donde volver. Por eso le decimos desde acá a toda esa gente que cree que esta es una nueva canción de Arjona, que se compre cotonitos y unos audífonos nuevos y escuche menos radio y lea menos críticas musicales que suelen poner estrellitas.

“Some girls are bigger than others”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=wAzmQbfZoIg[/youtube]

Esta debe ser una de las canciones con el estribillo más repetido en la historia de The Smiths, y podemos arriesgarnos a decir que tal vez es porque Moz sabía que una verdad tan simple como esa no debía decir demasiado más que eso. Y los que tienen memoria auditiva más que ser unos snobs autollamados melómanos, sabemos que cuando Morrissey dice mother en una canción es que se puso a hablar realmente en serio con sus fantasmas. No por nada esta es una de las canciones que menos ha tocado en vivo y que cuando ha abandonado un escenario en medio de un recital, esta se lleva uno de los mayores porcentajes.

Nada más decir que cuando la canta no se siente cómodo y hasta pone voces medio guturales.

Terminemos diciendo que es también una de las pocas en donde dice “girls” y agreguemos también que tiene uno de los mejores finales posibles: “Send me the pillow/ the one that you dream on/ and i’ll send you mine”.

Recemos en cadena para que Rosen no se entere.

“Half a person”
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=ZbkKZ_KnmK8[/youtube]

“She said: in the days when you were hopelessly poor i just liked you more”. Esta no puede sino ser una de las frases más lapidarias de toda la discografía de los “Pérez”.

Los primeros periodistas que tuvieron que decir algo acerca de ellos, escribieron alguna vez que la razón de llamarse The Smiths se debía a David Smith, el testigo de un asesinato en Manchester, muy estilo asesino del zodiaco, pero que Morrissey rápidamente desmintió diciendo que se llamaban así porque era el nombre más común y corriente y que era hora de que la gente más corriente se mostrara al mundo.

Hay que acostumbrarse a que esa idea de “común” no es la que nos vende LUN o que para Moz lo común es ese tipo de sufrimiento del que entra a la universidad y pide quedarse aún teniendo que lavar los baños. Los Smiths no se conocieron estudiando arte como miles de bandas que conocemos, ni estudiando publicidad como Soda Stereo.

Los Smiths son de los que repiten eternamente que si les das un minuto, te pueden contar la historia de su vida porque en algún lado siempre han creído que nadie los escucha. Cuando Jarvis Cocker habla de los “Common people” o The Clash canta “Rudie can´t fail” están hablando un poco de lo mismo:

(Ok) I went to the market to realise my soul
‘Cause what I need I just don’t have (Don’t have)
First they curse, then they press me ’till I hurt
We say, ‘Rudie can’t fail’

Una vez existió en Chile una banda llamada Fuck you Costello y se llamaba así porque lo culpaban de haber sido una especie de Hitler del punk, además de haber hecho una especie de inseminación artificial entre el punk y el new wave o algo parecido a una democracia cristiana del rock.

“Half a person” se trata un poco de todo esto. Y si la dejamos para el final, es también porque creemos que en algún lugar Morrissey es una de esas mitades que exceden el blanco y negro y exceden a Jekyll y Hyde. De alguna manera sabemos que sigue siendo de esa poca gente que puedes escuchar un disco o leer un libro con sus letras y que todo siga teniendo sentido. A los que creen que nos fuimos a la mierda, hagan el intento de leer los libros de poesía de Spinetta y nos avisan si les pasa algo como sucede con Morrissey.

Les dejamos acá el playlist de nuestras 5 elegidas.