Everyday [is not] like sunday: Morrissey por primera vez en Paraguay Super 45diciembre 10, 2015Blog0 Comentarios Morrissey se presentó en Paraguay el domingo 6 de diciembre, en el marco de su gira latinoamericana. Nuestra colaboradora y morrissiana n°1 Daniela Leiva estuvo ahí. Este es su reporte (y diario de fan) del debut de Moz en el Yacht y Golf Club Paraguayo. Podría haberlo visto hacía unos días en Chile, pero ir a otra de las fechas del tour de Morrissey en Latinoamérica, se transformó en una necesidad de esas medio obsesas adolescentes. Ni la pega ni la disponibilidad de pasajes permitió un viaje a los destinos más lógicos (y baratos), como Argentina o Brasil. Así que las alternativas se reducían a la billetera. Y casualmente y de la manera más extraña, tenía mis tickets de avión, el contacto por WhatsApp con la comunidad de fans locales y una maleta con dos poleras de Moz y los Smiths, con destino a Paraguay. El concierto en el país de la sopa dura, la Guerra del Chaco y gente que al emocionarse lo hace en guaraní, debía ser el día sábado 5 de diciembre. Nadie esperaría que la madrugada previa se viniera la peor tormenta de las últimas dos décadas. Dejando al país bajo el agua, con 40° de calor y 100% de humedad. Con la tristeza y las víctimas. Pero era la primera vez que Steven Patrick Morrissey, ex líder de The Smiths, tocaba en Asunción y la espera de los fans desde el fallido intento del 2013 sólo generó mayor expectativa frente a un show que se retrasó por un día, llevándose a cabo finalmente el domingo 6 frente a más de 5000 personas. En la intimidad bizarra que la cancha de tenis de un Club de Yates te puede dar. La espera –aparte del show horrible de cambio de vuelos para muchísima gente- significó tiempo libre, para meterme en la comunidad morrissiana paraguaya y adentrarme en los fans que lo siguen por todo el mundo. Pero lo principal, lograr acercarme a miembros de la banda y tener una mirada distinta del adorado Moz. Había un tema clave. El temor que Morrissey cancelara a última hora por que viera atentados sus principios de militante vegano radical: no podría haber nada derivado de animales a su alrededor. Pero la eventualidad que sintiera olor a carne en un país que vive de los Lomiteros (una especie de stands de sánguches asados de carne increíbles) y/o que se diera cuenta que la entrada estaba auspiciada por Burger King, eran ciertas. Con la frase “Señores Lomiteros y afines: NO ARRUINEN NUESTRO SUEÑO. La venta de CARNE en los alrededores del Yatch& Golf Club, puede ocasionar la suspensión del evento por parte del artista”, los fanáticos se anticipaban al problema. Fernando Colmán, líder de la comunidad de fans locales, expresa: “Fue toda la rabia acumulada en una frase (…) años de esperar, para que otros vengan y lo arruinen. Jamás pensé que tendría esta repercusión”. La imagen que fue compartida casi 70 mil veces en las redes sociales, tuvo el impacto esperado. Si bien las amenazas de hacer asados estaban, no se cumplieron y una valla estaba superada. El día antes del show nos fuimos al hotel donde se hospedaba Morrissey y los músicos con las ganas de que los mensajes de Facebook que ya me habían contestado tanto Matt Walker, baterista de la banda como el multiinstrumentista de origen latino Gustavo Manzur, tuvieran algún efecto: Gustavo Manzur bajó a darme el beso y abrazo prometidos y dedicó palabras de agradecimiento a Chile. Fue en ese momento en que acordamos que la bandera chilena que había llevado con un artesanal “Chile’s heart is full” se la iba a lanzar al escenario cuando estuvieran tocando “Speedway” versión renovada, en donde todos los músicos rotan de posición, quedando Manzur a cargo de la voz mientras Morrissey se va a los teclados. Finalmente cuando al día siguiente entonó el: “Yo nunca dije, yo nunca dije (…) yo siempre seré fiel a tí”, la bandera chilena voló a sus manos y lo acompañó en su teclado por el resto del recital. Gracias Gus! El concierto fue de los más intensos que he visto y esa visión desde la banda hacia Moz, al final era la que tenemos todos/as: lealtad y fe. Matt Walker, baterista de Morrissey y quien también ha compartido escenario con Smashing Pumpinks, nos compartió la sensación al caminar hacia el escenario con la certeza que se trataría de un show especial: “Nos recibió una cascada conmovedora de amor y pasión, que nos inspiró para dar lo que se convirtió en uno de los mejores show hasta la fecha. Asunción no es un sitioque muchos artistas se esfuercen por visitar. Sabiendo esto, podría decir que esa noche, no era para darla por sentada; ni por la audiencia y sobre todo, por nosotros”. Por primera vez luego de haberle visto 7 veces desde la primera vez que tocó en Chile el 2000, con el mejor setlist de la vida, estuve en la reja pegada como lapa. Con Morrissey al frente mío. Con la posibilidad de revisar sus gestos en cada canción. Su elegancia, pasión y desidia. Su crítica social y política. Su british anarquía, con este amor latino que ahora le recorre el cuerpo. Con sus toques flamenquitos y guiños a la Santa Muerte. Con su “Meat is murder “haciéndome sentir pésimo en serio. Por primera vez sentí que eran los ‘80 y estaba viendo a esta culebra retorcerse, esperando ser acariciada. Y sí. El chico de los suburbios industriales estaba ahí, con 56 años. Y sí, había roto todo queriendo que el hemisferio norte se rasgara y avasallara su propio metro cuadrado de espacio personal, hace muchos años. El paradigma seguía siendo el mismo. Aunque no exactamente. Ahora viene a tocar acá, a las latinas américas. Acá donde aullamos y le decimos que lo amamos eternamente a grito pelado, con lágrimas en los ojos, tocándolo con fuerza. Porque le agradecemos. Le agradecemos habernos acompañado en los momentos más felices y los más tristes. Le agradecemos que pese a todo, siga. Que le siga dando patadas a los indies. Que no puedan decir rock alternativo sin nombrarle. Porque para algunos, no hay día que pase en que no escuchemos a los Smiths o Morrissey en solitario. Porque ya son demasiados años con esta banda sonora de la vida. Porque seguirá siendo así. Y en Paraguay, también lo saben. Morrissey setlist Paraguay 2015 Suedehead Alma matters You have killed me Speedway First of the gang to die Ganglord I’m throwing my arms around Paris World peace is none of your business Staircase at the university How soon is now?(The Smiths song) Kiss me a lot Jack the ripper I will see you in far-off places Everyday is like sunday Meat is murder (The Smiths song) Let me kiss you The world is full of crashing bores ( primera vez que la tocan en el tour) Istanbul What she said (The Smiths song) The bullfighter dies The Queen is dead (The Smiths song) Encore: This charming man (The Smiths song) Aquí un video de “Everyday is like sunday”: “First of the gang to die”: