Definitivamente, 2016 será un año para olvidar.

Anoche, a través de una publicación en su página oficial de Facebook, se confirmó la muerte del cantante, compositor y novelista Leonard Cohen, ocurrida el 7 de noviembre pasado en su hogar de Los Angeles (California), por motivos que aún no han sido revelados.

Nacido en 1934 en el seno de una familia judía de clase media en Westmount (Canadá), Cohen se interesó por la música y la poesía a los 14 años, devorando las obras de Federico García Lorca al mismo tiempo que aprendía a tocar la guitarra y comenzaba a refinar su extraordinario talento para reflexionar sobre temas como religión, sexo, política y relaciones humanas.

Tras terminar sus estudios universitarios, en 1957 se instaló en Montreal y más tarde en la isla griega de Hidra, donde pasó la mayor parte de los 60’s dedicado a escribir poesía y novelas como The Spice Box Of Earth (1961), Flowers for Hitler (1964) The Favourite Game (1963) y Beautiful Losers (1966), antes de publicar Songs Of Leonard Cohen (Columbia, 1967), debut discográfico que lo puso a la par con cantautores como Joni Mitchell, Neil Young o Tim Buckley. En 1977 intentó dar un nuevo giro a sus canciones asociándose con el productor Phil Spector para el álbum Death Of A Ladies’ Man, episodio no exento de polémicas: Spector habría amenazado a Cohen con una ballesta y mezcló el álbum por su cuenta. El resultado final fue considerado “grotesco” por el músico, quien se marginó de toda actividad promocional hasta la salida de Recent Songs, disco autoproducido en 1979 donde regresó a un sonido más tradicional.



Durante los 80’s, Cohen se involucró en proyectos como la creación del documental/musical Night Magic junto a su compatriota Lewis Furey, apareció en un capítulo de la serie Miami Vice interpretando a un agente de Interpol y editó discos como Various Positions (Columbia, 1984) y I’m Your Man, álbum cargado de sintetizadores y letras con agudos comentarios sociales. La aparición de canciones como “Everybody Knows” en películas como “Exotica”, “Pump up the volume” y “Natural Born Killers” mantuvo fresco el nombre de Cohen en las generaciones de principio de los 90’s. Incansable, siguió produciendo obras notables como The Future (Columbia, 1992) y retornó a la poesía con el libro Stranger Music: Selected Poems And Songs (McClelland & Stewart,1993) antes de recluirse por cinco años en el Centro Zen Mount Baldy de Los Angeles, donde fue ordenado monje con el nombre de Jikan (“Silencio”).



De vuelta en la vida civil, a fines de los 90’s, retomó la música, involucrándose en la preparación de recopilatorios y nuevo material para discos como Ten New Songs (2001), aunque no todo fue miel sobre hojuelas: A mediados de 2005, Cohen y su hija Lorca denunciaron a Kelley Lynch, representante del músico, por vender sus derechos musicales sin autorización, y apropiación indebida de más de 5 millones de dólares. Pese a que Lynch fue condenada, el dinero nunca pudo ser recuperado.

Sin mostrar signos de agotamiento, volvió a salir de gira después de 15 años, recibió el Premio Príncipe De Asturias en 2011 y retomó el trabajo musical con obras como Old Ideas (2012), Popular Problems (2014) y el flamante You Want It Darker (2016). Previo a la salida del álbum, Cohen señaló que se encontraba listo para morir y que posiblemente no sería capaz de terminar las canciones y poemas que lo mantenían ocupado en ese momento. Más aún, a principios de este año supimos de una sentida carta enviada a su musa y amiga Marianne Ihlen, solo 2 días antes de que ella muriera, con frases tan desarmantes como “Marianne, ha llegado el momento en que estamos muy viejos y nuestros cuerpos empiezan a desmoronarse, y creo que te seguiré muy pronto. Debes saber que estoy tan cerca de ti, que si estiras tu mano, creo que alcanzarás la mía”.



Queda el consuelo de saber que Cohen ha partido tranquilamente, como indicó su hijo Adam: “Mi padre murió en paz en su casa de Los Ángeles, sabiendo que había grabado lo que él sentía era uno de sus mejores discos”.
Buen viaje, Leonard. Nunca terminaremos de agradecerte por tanto

Te dejamos acá un playlist hecho con mucho cariño por el equipo de Super 45 en memoria de Cohen.