Lee Ranaldo & The Dust @ Centro de Eventos Cerro Bellavista. 14 de julio 2013 Walter Roblerojulio 15, 2013Blog1 comentario Fotografias: Rodrigo Ferrari Sonic Youth era un grupo al que resultaba difícil verles las costuras. Siempre se escribía de ellos como si no tuvieran influencias y, cuando se sacaban a colación, era por la vía de algún Glenn Branca, la No Wave o el ruidismo arty, como si aquella faceta de canción pop, muy preponderante en la carrera de los neoyorquinos, fuera de origen divino. Sin embargo, al enfrentarnos en vivo con Lee Ranaldo & The Dust, quedaron mucho más claras las herencias tempranas del guitarrista, tanto por el tipo de canción que viene componiendo – contundentes y ruidosas, pero también melódicas y vitalistas-, como por el repertorio ajeno del que hace gala. Porque, en este sentido, el amable lector estará de acuerdo con quien escribe que, si bien Ranaldo es inseparable de los entramados y texturas de su banda de origen (mal que mal fueron tres décadas ininterrumpidas de exploración), ahí también estuvo presente y diluido en su paleta sonora el legado de Love, de Big Star, o del primer Cheap Trick. Lo suyo, hoy por hoy es puro power pop para cantar con los ojos cerrados. Junto al eterno Steve Shelley en batería, el guitarrista Alan Licht (quien ha desarrollado una interesante carrera desde lo experimental y lo teórico) y Tim Lunztel en bajo, atacaron las canciones de su álbum del año pasado Between the times and tides (Matador, 2012) junto con adelantar varios cortes de su inminente nuevo disco, prometido para octubre próximo. Ranaldo, encantador y sencillo, se daba el lujo de meterse en su papel de narrador (su sabida pasión por la generación beat se delata en su amor por la experiencia) para presentar algunas canciones derrochando contexto. Nos contó de su etapa de adolescente que dio pié a “Xtina as I Knew Her”; de la inspiración que le provocó la fotografía de la famosa pareja de Vancouver besándose en medio de una violenta manifestación en el 2011 (tenía la imagen pegada en el reverso de una de sus guitarras) y que dio como resultado el tema “L.O.N.E”; de su época de veinteañero en el Nueva York de los 70s y todas las bandas maravillosas que pudo presenciar , a modo de introducción de una tremenda versión de “Thank you for send me an angel” de Talking Heads, que coronó una arremetida de covers impagables que Lee y los Dust hicieron suyos -se lucieron con “Revolution blues” de Neil Young y “Everybody been burned” de The Byrds-. Y que tremenda actitud aquella de no caer en la añoranza del cancionero de Sonic Youth, considerando que estaba la mitad del grupo ante nuestros ojos y hubo algunos poco ubicuos del respetable que lo pedían (aunque la mayor parte del público se sumió en un contenido deleite en plan “amor y paz”). Ranaldo y los suyos nos recordaron que el clasicismo guitarrero también puede entregarse con el coraje de alguien que, aunque tenga su cabeza platinada por los años, siempre seguirá siendo alma joven. Canas para respetar; un ejemplo a seguir. También puedes ver las fotos en nuestro Facebook