Fotos: Rodrigo Ferrari

La semana que recién pasó, como pocas veces, estuvo cargada de shows internacionales de primer nivel. Partimos con el esperado debut de Iggy Pop el lunes, Julia Holter el martes y Wilco el miércoles, para cerrar la semana con el inicio de la gira internacional de los veteranos Pet Shop Boys en Espacio Riesco para promocionar su más reciente disco Super.

El show contó con un total de 24 canciones y se dividió en cuatro segmentos: In the night, Sun, Inside y Euphoric. Cada uno con un juego de luces impecable que marcaba la temática del concierto y que nos recordaba que estábamos viendo a una banda con una de las mejores puestas en escena. La encargada del montaje del show fue la galardonada diseñadora británica Es Devlin, que entre sus múltiples laureles, fue la responsable de la apertura de los juegos olímpicos de Rio.

Todo partió a la hora con la intro de “Inner sanctum”, track extraído de Super, su trigésimo disco de estudio y la excusa para tenerlos por quinta vez en Chile. Fueron seis en total las canciones de su último disco, quizás algo excesivo para una banda con una discografía tan extensa, llena de hits y canciones memorables.

El primer hit llegó temprano con “West end girls”, provocando una euforia total. En ese momento se percibieron algunos problemas de sonido y también nos pudimos dar cuenta que la voz de Neil Tennant no ha permanecido incólume al paso de los años.

Siguieron con “The pop kids”, “In the night” y “Burn” acompañados de un trío de músicos impecables y una pantalla central que fue fundamental en la atmósfera del show. A esa altura el Espacio Riesco ya era una fiesta, donde todos bailaban, cantaban o se dejaban transportar por el increíble aparataje visual de los ingleses.

“New York city boy”, “Se a vida é” y los aires casi reggeatoneros de “Twenty something”, otro track extraído de su último álbum, siguieron la fiesta.

Para la última parte del show se reservaron los éxitos que la gran mayoría estaba esperando: “It’s a sin”, “Left to my own devices” y el clásico setentero de los Village People “Go west”, lo que solo afirmó la idea de que estábamos en la mejor fiesta del 2016.

En el encore nos brindaron otro par de hits: “Domino dancing” y “Always on my mind”, canción popularizada por Brenda Lee y Elvis Presley y que tocaron por primera vez en 1987, en un programa homenaje de la televisión inglesa por los 10 años de la muerte del cantante norteamericano.

Una outro de “The pop kids”, cerró tras casi dos horas, el espectacular quinto show de Neil Tennant y Chris Lowe en Chile. La música se había terminado, pero la sensación de presenciar uno de los mejores espectáculos de este 2016 se quedaría en cada uno de los que tuvimos la suerte de asistir.

Mira acá todas las fotos del show, por Rodrigo Ferrari.

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