Desde hoy inauguramos una serie de columnas sobre la actualidad de la escena independiente de España escritas por Daniel Hernández, fundador del sello Federación de Universos Pop (FUP), organizador del Santiago PopFest y encargado de prensa de Sudamerican Records.

Si uno piensa en la escena independiente española vista desde Chile se le vienen a la cabeza nombres como Los Planetas, Sr. Chinarro, La Buena Vida, La Habitación Roja o Nacho Vegas. ¿Qué tiene en común? Que todos tienen carreras superiores a 20 años. La influencia de una generación de lectores de la revista Rock de Lux (que llegaba con seis meses de retraso pero llegaba) hizo que algunos de esos nombres y otros de esa época se convirtieran en conocidos para algunos melómanos locales. A mediados de los años 90s la escena independiente chilena era prácticamente inexistente y la española, por afinidad, era cercana.

Pero en los últimos años ha habido muchos cambios en la escena independiente española que pasan muy desapercibidos para cualquiera que no la siga. Incluso en la propia escena ha ocurrido que, a pesar de la proliferación de medios en la red y de festivales (seguramente el número de festivales dedicados a la música más o menos independiente debe acercarse o incuso superar el centenar concentrados en los meses junio-septiembre, coincidentes con el verano del país) ha habido un quiebre entre una especie de “primera división” de bandas muy multitudinarias que copan esos festivales (algunas como Vetusta Morla, Love of Lesbian, Sidonie, Izal, Dorian…) en lo que se ha venido a denominar indiestream, neologismo nacido de la mezcla entre indie y mainstream. Algo así como el equivalente español a bandas como Muse, Killers o ImageDragons que actúan de manera continuada en festivales con corte indie aunque sus presupuestos estéticos y musicales estén diluidos en una especie de receta para la radiofórmula convencional.

Por debajo de ellos aparecen cientos de bandas interesantes con propuestas renovadoras en un caso, revisionistas en otra, más serias, más festivas, de géneros diversos, desde el garage al twee, desde la electrónica a al proto-punk que luchan por su pequeño espacio en un mercado claramente saturado por la mayor facilidad de tener un espacio (aunque sea ilusorio y virtual como un soundcloud o un bandcamp y una mención en un blog personal) que existe a día de hoy.

En estas columnas mensuales trataré de acercar parte de la música que considero más interesante de los últimos tiempos y que quizá, con la avalancha diaria de novedades, se pierde o no ha conseguido llegar al público chileno. Si bien hay bandas que cuentan con cierto público potencial aquí como pueden ser Los Punsetes, La Casa Azul y otras que han dado el salto al circuito internacional vía Pitchfork y su onda expansiva como El Guincho o Delorean hay mucho más que ha aparecido en los últimos tiempos de las que es probable que el aficionado chileno no tenga demasiadas referencias.

Alguna de ellas son parte del programa de radio de Super 45 de esta semana, complemento a este artículo. Fueron varias bandas diferentes como Sagrado Corazón de Jesús, Mourn y Juanita y los Feos. Sagrado Corazón de Jesús pertenece a esa estirpe de pop español que hunde sus raíces en bandas como Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán, siguiendo por Vainica Doble, la etapa en solitario de Carlos Berlanga y aterriza en el sonido donosti de Family o La Buena Vida por buscar nexos de unión.

Pero también encontramos sustrato claro de bandas como Pet Shop Boys o New Order circa Low life. Este proyecto liderado por Jesús Fernández (de ahí el nombre del grupo) nace en La Rioja (cuna de algunos de las mejores más excitantes bandas españolas del momento como Espanto o Violeta Vil) y en 2014 el fantástico sello barcelonés Discos de Kirlian recopila lo mejor de sus demos en el disco Opera omnia en una edición de 100 copias que vuelan. Llaman la atención del más clásicos de los sellos indies españoles Elefant Records y decide editar un mini-LP en 10” con seis canciones. El disco, Locus amoenus, es un tratado de pop cristalino exquisito en el que destacan los arreglos de Judit, hermana de Jesús y acompañante en el directo. Un directo muy atractivo en el que Jesús aparece vestido de crooner, incluso llevando un micro cincuentero, y la talentosa Judit le acompaña al violín. Guille Milkyway de La Casa Azul comentó vía tuiter “Esto es una maravilla del siglo XXI. De aquellas cosas que salvan a la humanidad. El virtuosismo” . Poco más que añadir.

Otro grupo novísimo que sigue la estela de bandas aupadas por Pitchfork son las jovencísimas Mourn desde Barcelona. Su caso parece una historia de manual de cómo llegar al éxito casi sin querer. Dos adolescentes tiene un flechazo amistoso el primer día de clases en el colegio al reconocerse como semejantes en la polera bandas que llevaban ambas. Ellas son Carla y Jazz. No saben tocar, tienen 16 años, pero quieren tener una banda. A ellas se le unen la hermana de Jazz (Leia) tres años menor y Antonio amiga de las chicas a la batería. Leia y Jazz son hijas del afamado músico Ramón Rodriguez más conocido por The New Raemon con exitosa carrera en solitario tras dejar de lado su proyecto de largo recorrido Madee, una banda de emo y post-hardcore ícono del underground español. El pasado año editaron Otitis, un 7”, en un sello de Barcelona llamado Sones.

En Septiembre sacan su disco de larga duración. Las críticas son buenas pero nada espectaculares para un disco que bebe claramente de sonidos como los de PJ Harvey, Liz Phair o los Pixies y en muchas de las notas destacan el parentesco de las hermanas y su padre, además de la edad de los componentes. Aunque esto no resta ni un ápice de frescura a un disco divertido y 100% disfrutable. Por razones, el disco llega a oídos de Mike Sniper, capo del respetable sello Captured Tracks (Mac De Marco, Wild Nothing, Beach Fossils…), se enamora del disco y decide editarlo en Estados Unidos y para el resto del mundo. Pitchfork nombra la canción “Otitis” Best New Track y todo se precipita. Stereogum lo elige como Disco de la Semana y comienzan una intensísima gira por festivales de todo el planeta casi sin saber cómo ha pasado.

Algo similar a lo ocurrido con Hinds. Nacidas como dúo y con el nombre de Deers pero obligadas por una denuncia de otra banda a cambiar el nombre a Hinds y ya como cuarteto, las madrileñas colgaron una demo de dos canciones en bandcamp y sin saber muy bien cómo fueron reseñadas en Gorila Vs Bear y NME. Los Black Keys y Primal Scream las recomendaron en entrevistas, Black Lips se declaran fans de ellas y van a tocar a Reino Unido llenando salas de aforo medio con apenas cuatro canciones conocidas. Su rock garajero cantado en inglés gusta tanto en la cuna del pop que los Libertines las eligen para abrir varias fechas por Europa, comienzan a girar por diversos países y todo ello con esas mismas cuatro canciones conocidas. Sus compañeros de sello The Parrots se benefician de esta ola y también consiguen una exposición internacional muy superior a la que reciben en España. Lo último es que Hinds han sido confirmadas para tocar en Glastonbury en el John Peel Stage, uno de los escenarios principales que compartirán con Suede o Death Cab For Cutie, entre otros.

Juanita y los Feos es un nombre irresistible. No es una banda tan nueva como las otras citadas porque parten en 2004 con demos y la publicación de diversos 7”. Provenientes de la escena mucho más hardcoreta que puramente indie en 2011 el veterano sello Munster decide editar su primer larga duración, el extraordinario Pesadilla adulta toda una declaración de principios desde su título. El disco se abre con ‘El final‘ en opinión del que esto escribe una de las mejores canciones españolas de este siglo. La canción y el disco les abre nuevos públicos y escenarios más allá de los muy underground en los que se estaban moviendo hasta ese momento y a la altura de su segundo largo Nueva Numancia de 2014 ya tiene una base sólida de seguidores suficiente para arrastrar un buen número de público. El nuevo disco sigue las coordenadas del anterior con esos ecos de la nueva ola madrileña, o sea la versión española del punk y el post-punk bailable de finales de los 70s primeros 80s con bandas como Pegamoides como influencia obvia y con otras como Parálisis Permanente o Desechables en su ADN y también bandas de fuera de España como The Cramps por su gusto por la serie B, los fluidos y una lectura social en sus letras nada obvia o panfletaria pero evidente.

Otras bandas a las que se podrían relacionar estarían las muy interesantes Sangre y incluso con Cuello. Pero también con la banda pamplonesa Kokoshca, autores de otra de las grandes canciones españolas en muchos años ‘La fuerza‘. Lamentablemente Juanita y los Feos anunciaron un receso este año pero, por suerte, la vocalista y uno de los guitarristas deciden emprender otra nueva propuesta llamada Rata Negra con coordenadas similares al proyecto anterior que nos deja un poco menos huérfanos.

Infinitas propuestas que nacen constantemente y de la que, poco a poco, se irán viendo en esta serie de artículos en Super 45.