Macarena Lavín fue a Ruidosa Fest y asistió a los conversatorios centrados en esta oportunidad en la autoestima de las mujeres en el mundo de la música.

La catarsis colectiva fue más fuerte en las primeras dos ediciones, era una instancia nueva de desahogo a punta de ebullición. En su tercera versión la comunidad de Ruidosa ya está encaminada y se nota que ha crecido con mucha fuerza. Por eso sus conversatorios se centraron esta vez en la autoestima y en el espíritu colaborativo entre mujeres. Contando con ese respaldo colectivo, sigue el llamado a hacerse oír y respetar o en muchos casos denunciar injusticias y abusos. Así el lema del festival “mujeres que hacen ruido” se encuentra aún vigente.

The future is female

La primera charla sobre música fue el jueves 5 de abril en el teatro IF con la visita de Madame Gandhi, desde Estados Unidos. Matemática, baterista, compositora y activista del feminismo nos habló de los caminos que siguió para llegar donde está ahora recorriendo el mundo dando charlas. Nos contó que desde la infancia su amor por el hip hop se vio manchado por la agresividad de sus letras contra la mujer. “No quiero bailar canciones que se tratan de nuestra opresión” se dijo entonces. Salió de un colegio de mujeres y se encontró en la universidad con un panorama diferente. En la sala de clases se sorprendió el poder dominante de los hombres al tomar la palabra. En el trabajo vio siempre que el ganaba el que hablaba más fuerte.

Aprendió que a pesar de todos esos obstáculos había que seguir lo que una quería. Si te dicen que no vas a lograrlo, intentar de todas formas lo que te propones. Ella, por ejemplo, asistió a clases de un MBA en Harvard mientras estaba de gira como baterista de M.I.A., aunque tuviera que viajar diariamente para lograrlo. Son dos cosas que realmente quería completar.

Madame Gandhi nos dejó varios consejos a seguir pero destacamos tres. El primero es elegir un ambiente de trabajo donde estemos cómodas y seguras para que entonces podamos desarrollarnos mejor. El segundo está dirigido para quienes hacen música específicamente y tiene que ver con estudiar bien la industria discográfica, para adelantarse a problemas que puedan surgir. Sobre todo ahora que toda la información está disponible en blogs y artículos del tema. Finalmente, y tal vez lo más inspirador vino en forma de pregunta: “si te dieran tres horas al día ¿cómo lo usas? ¿a cuáles de tus pasiones dedicarías ese tiempo?”. De esta manera se puede reconocer la vocación personal, cuál es el talento en el que hay que trabajar e invertir.

Desde la música: dale con el look

El sábado 7 de abril fue el día central del Ruidosa Fest. Por el escenario pasaron Beatriz Pichi Malén, Dulce y Agraz, Javiera Parra, Lia Nadja, Princesa Alba, entre otras, para cerrar con un impecable show de la fundadora del festival y plataforma feminista, Francisca Valenzuela.

A media tarde la misma cantante moderó el panel “Desde la música” en que conversó con cinco personajes de la escena local. Estaba citada la rapera Zitazoe, representando a una escena más underground, y la pianista clásica Mahana Tehave, que es reconocida mundialmente. Desde el pop estaban las consagradas Denisse Malebrán y Javiera Parra y una más cantante bastante más reciente, Camila Gallardo.

Cuando Zitazoe decidió dedicarse a la música no fue donde su mamá y le dijo “dame plata porque quiero un computador para ser rapera”. Tuvo que ganarse cada peso. Una vez inserta en la escena se dio cuenta que la mayoría del mundo hip hop es masculino. Finalmente logró hacerse un espacio para ella y sus pares creando un festival del género Femme Rap Fest. Su liderazgo lo demostraría esa noche más tarde cuando estuvo a cargo de la “Batalla de las gallas” en el escenario, tal vez uno de los mejores shows de la jornada.

Mahani Teahave sabía perfectamente con qué maestros quería perfeccionar su piano. Sin beca en sus comienzos  partió primero a Estados Unidos y luego a Alemania. Una vez que alcanzó cierta notoriedad gracias a premios y reconocimiento pudo dar a conocer una de sus inquietudes. En una entrevista contó que le preocupaba el desarrollo de los talentos de Rapa Nui. La información llegó a oídos correctos, a gente que quiso ayudar, consiguiendo abrir la escuela la Escuela de Música y de las Artes Toki. Así pudo hacer un cambio desde donde trabajaba y cambiar la vida de muchas personas.

Por otra parte, Denisse Malebrán y Javiera Parra y Camila Gallardo relataron su experiencia de pertenecer a las multinacionales en que la exposición es constante y enorme. “Que te eligiera (un sello)” dice Javiera Parra “es que eras tocada por una varita mágica”. Eso le pasó a mediados de los 90s cuando triunfó con hits como “Te amo tanto”. Desde ahí sentía la presión de que además de tener que ser buena compositora, intérprete debía ser agradable a la vista. “Y una a veces quiere salir a cantar en pijama”, remató. Denisse Malebrán partió su carrera en la misma época autoeditando su primer álbum con su grupo Turbomente. Luego pasó a ser la vocalista de Saiko, que firmó contrato con la EMI, donde le pidieron que bajara de peso. Ahora ella pide que se les deje envejecer y que si se quiere ser atractiva, serlo de la manera que se les antoje.

Han pasado 20 años y el panorama en ese ambiente no es muy alentador. A Camila Gallardo (ganadora del concurso de talentos The Voice 2016 y fichada por Universal) le resulta agotador que cada decisión en su carrera tenga que pasar por un panel de 20 personas. Se le exige sonreír y lucir tan perfecta como complaciente. En diciembre pisó el escenario de la Teletón del 2017 con un chaleco amarillo y le llovieron las críticas ante un look tan informal. En pocos minutos eso era la noticia, trending topic y no que venía llegando de un evento de la Bilboard Mujeres en EE.UU.

Si hay algo que agrupó a todas es tener “cuero duro” ante las críticas y opiniones. “Pero a veces no lo tenemos”, comentó entonces Camila Gallardo “y lo pasamos mal, nos duele la guata. Por eso escribimos lo que escribimos”.

Finalmente, Zitazoe aconsejó nada más que evitar los posteos negativos en internet, porque afectan el autoestima de las cantantes. En la misma sintonía, Denisse Malebrán nos instó a romper con el tipo de violencia de creer siempre en lo que dicen los demás. Para reforzar la autoestima y desafiar el tema de la apariencia Javiera Parra dio en el clavo: “el motor que debemos tener es querer y creer en lo que estamos haciendo. Si tenemos esa verdad, el mundo lo percibe como algo honesto”.

*Fotos: Rosario Oddó para Ruidosa