Publicado el 15 de junio de 1989.

Kurt Cobain era ambicioso desde niño: quería ser presidente o estrella de rock. Una vez que formó Nirvana perseveró hasta que logró alcanzar esa meta. Cuando Bleach estuvo terminado le dijo a Jonathan Poneman de Sub Pop que vendería millones y le contestó “oye, loco, estai volao”, según recuerda para la revista inglesa Uncut. Claro que después de Nevermind los fans se encargaron de darle la razón a tal idealista pronóstico, porque vendió dos millones de copias en muy pocos meses y destronó a Dangerous de Michael Jackson del primer lugar del ranking Billboard.

La relación entre Sub Pop y Nirvana no era la mejor. Para Cobain, este sello era el segundo de su lista, porque el primero era Touch and Go!. Al final, la disquera de Poneman y Bruce Pavitt tuvo más visión a futuro, o bien, suerte. Una vez fichados, grabaron Bleach en pocos días y principalmente durante las noches donde trataron de simular el sonido en vivo. En las perillas estaba el productor Jack Endino. Eso sí tuvieron muy poco presupuesto para terminar de grabar Bleach. Tanto que Jason Everman, el segundo guitarrista de esos días, tuvo que poner dinero de su bolsillo. El vocalista se molestó porque los ejecutivos eligieron como single “Love buzz” (original de Shoking Blue) en vez de una canción propia. Sin embargo, era la que más pegaba en las tocatas. Pero Sub Pop sabía lo que hacía. Su fuerte sería la promoción y giras. Por eso les pagó a varios periodistas ingleses para visitar a Seattle. No solo sirvió para una abrumadora cobertura en la prensa especializada como las revistas NME y Melody Maker, sino que para llevar a Nirvana a Reino Unido e incluso grabar la primera de tres sesiones con el legendario DJ John Peel a finales de 1989. La leyenda ya comenzaba.

Bleach es álbum furioso, desesperado, visceral, oscuro e intenso. El álbum comienza luminoso y energético, aunque no por eso menos deprimente y a medida que van pasando las canciones se va hundiendo en la sonoridad stoner. También integra melodías zeppelianas como por ejemplo, “Mr. Moustache” o expresa tanto enojo como sea posible en la adrenalínica “Negative creep”. Son melodías que se deterioran y se tambalean a medio camino como si se fueran a desarmar. “About a girl” que es una joya pop dentro del stoner Bleach. El biógrafo de Cobain, Charles R.Cross, cuenta que el día que la compuso, escuchó tres horas seguidas el Meet The Beatles, grupo clave en su infancia. De hecho es la última canción que escribió dentro de todo el repertorio. Por eso, hace enlace con lo que vendría en Nevermind. Pero en los tiempos de Sub Pop no era cool incluir más canciones pop aunque quisiera. En una entrevista con NME antes de lanzar el segundo disco, el líder de Nirvana dijo: “Incluso poner ‘About a girl’ en Bleach era arriesgado. Yo estaba muy pegado con el pop. Realmente me gustaba R.E.M. y cosas de los 60s pero había un montón de presión en esa escena, el underground”.

Lo indistinto del álbum, entre el anhelo pop, la depresión y desesperación hacen de Nirvana algo único que los mismos integrantes describen en otra entrevista (póstuma) con NME. Son palabras de Kurt: “Probablemente, lo que nos hace únicos es que somos capaces de tocar realmente canciones suaves y realmente pesadas y mezclarlo todo. Es algo que se ha hecho antes, pero no muy seguido”.