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Un disco para acostarse pero sin dormir. Un disco de ambient que no lo es.
Henrik Jonsson es un músico oriundo de Göteborg, Suecia, con una bizarra foto promocional. Milita actualmente en el sello City Centre Offices, casa de músicos de sonido limpio y refinado como One Second Bridge y The Gentleman Loosers. En una senda similar, New Exclusive Olympic Heights (CCO, 2007) es su reciente disco compuesto de 14 breves piezas heterogéneas, tomando diversas formas e instrumentos acústicos y electrónicos a lo largo de los casi 35 minutos de duración y donde se sienten inmediatamente influencias de bandas progresivas de los ‘70 cargadas al uso de teclados como Tangerine Dream, Mike Oldfield y algunos pasajes de Pink Floyd (‘U.S Saloon Props 41-59’ en especial, suena muy similar a ‘Wish you were here’). Para los que piensen que nos encontramos simplemente ante otro revival de sonido clásico, esto no suena en lo absoluto retro, ya que Jonsson se las arregla para invocar a dichos referentes pero con un sonido contemporáneo, típico de procesamiento de laptop e instrumentos vst.

Siempre de tempo bajo, relajado, etéreo, pero por sobre todo, bastante cuerdo y estructurado, sin llegar a la monotonía de un plano y poco inspirado disco ambient, se toma pequeños riesgos que en su mayoría funcionan. A veces fracasa como en ‘En Hyllning till cyckeln’, una pálida y desabrida pieza de piano con intención melancólica que se siente fuera de lugar en el disco y también con ‘My lovely wife Becky’, que es solo una grabación de un tipo balbuceando como mercadear arte en tiempos modernos. Los aciertos van en el resto del disco con algunos ejemplos: ‘Giftwrap yourself, slowly’, una de las piezas más interesantes del álbum se muestra como un híbrido entre el sonido plástico del pop ochentero y el intento de un instrumental electrónico actual. ‘Tools For Trains’, con su hipnótico y triste “timbre” entra de primera por su simple genialidad. ‘Copyright the universe’ es el drone misterioso, letárgico y de ciencia ficción, imprescindible para amenizar reflexiones y rollos personales al borde de la ventana del bus, mientras que ‘Cubical Fever’ es una pieza completamente diferente, incursionando en escalas y sonidos medio-orientales. ‘Hierarkisk symmetri och romantik’ es una composición con unas cuantas notas dramáticas de teclado que van y vienen, creando un mini loop que daría para estar largo rato disfrutando, pero que lamentablemente se acaba antes del minuto.

Completamente instrumental (a excepción del track hablado), una buena apuesta para tener en cuenta entre lo más destacado del 2007.