Parte de un proyecto ambicioso que también incluye una película, Going, going…, el noveno disco de los clásicos ingleses The Wedding Present, se ajusta a la tendencia de los álbumes visuales. Para efectos de este párrafo, lo que cuenta es su veintena de canciones, una cifra que tiende a proyectar autoindulgencia y falta de edición, pero que aquí se justifica porque hay suficiente riqueza musical para sostenerla. A partir de piezas de cariz incidental, como las primeras, David Gedge y su banda transitan a un rock neblinoso que luego se disparata y deja de ser tan compacto, para culminar en un último bloque distinguible donde todo se conjuga de forma natural. Una experiencia cansadora, sí, pero gratificante.