La primavera trae lluvias esporádicas, sentimientos fuertes y brisas calurosas que reemplazan a los chalecos de invierno. Todo eso parece estar impregnado en el debut homónimo del trío chileno Yeti, editado en el pasado mes de octubre y que contiene 13 canciones más “Fin”, un hidden track camuflado a instancias del bajista del grupo y ex Pettinellis, Cristián Espiñeira. Es un álbum triste, íntimo en altas dosis, pero sin llegar a ser empalagoso. Al contrario, en muchos pasajes, las adictivas guitarras rítmicas hacen olvidar el letargo de la melancolía para obligar a levantarse e ir a bailar.

Con tintes postpunk y estribillos pegadizos, el leitmotiv del disco va construyéndose entre todos aquellos ingredientes que conlleva una ruptura amorosa. La pena y la nostalgia en “Nunca más??? (“Nada puedo hacer si ya no queda más / Demasiado tarde para intentar recomenzar“) los celos sin esconder en “Dímelo??? (“Dónde estuviste ayer / con quién hablaste“) y el orgullo propio de “Soy como quiero??? (“Soy como quiero y eso nunca lo olvidaré“), funcionan como casi una declaración de principios. Aunque una de las más destacadas no pertenece a esta cadena de duelo y olvido. Se trata de la notable “Aburrida???, un tema que pareciera haber brotado en un día de lluvia entre el montón de canciones que el grupo completado por Lucas Sanhueza (voz y guitarra) y Patricio Jarpa (batería) archivaron por años.

Para un trío que cambiaba de repertorio cada vez que tocaba en vivo, es todo un mérito haber dado con un sello sonoro que, a ratos, los emparenta con grupos como Kaiser Chiefs o Coldplay. Sí, otra banda chilena mirando a Inglaterra, pero al menos suena fresca y actual, pues no se queda ni en los 60’s o los 90’s. Lejos de ser otro ejercicio gratuito de nostalgia, Yeti va hacia adelante.

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