El “inventor” del punk (o al menos su primer product manager), Malcolm McLaren, representante de los Sex Pistols, New York Dolls, Bow Wow Wow y varios más, murió esta mañana en la ciudad de Nueva Cork. McLaren arrastraba un cáncer desde el 2009, del que hasta hace poco se veía recuperado. Sin embargo, su salud empeoró rápidamente y murió hoy a los 64 años.

A principios de los 70s, McLaren visitó Nueva York varias veces buscando ideas para sus boutiques de moda que poseía junto a su ex pareja Vivienne Westwood. Según una serie de eventos fortuitos (relatados con lujo de detalles en el libro Please Kill Me de Legs McNeil y Gillian McCain), McLaren se convirtió en manager de la última fase de los New York Dolls llevando su look glam al extremo de la provocación, como tocar en pequeñas ciudades del sur de Estados Unidos con la bandera sovietica en el fondo y con el libro rojo de Mao en el pecho. Luego de esta experiencia, volvió a Londres y el resto es historia bastante conocida.

Más allá de su polémica trayectoria como manager y músico, McLaren tuvo la innegable capacidad de siempre estar en el momento y lugares correctos (su aparición en el documental Style Wars sobre los origenes del hip hop da prueba de eso).

Según declaró su portavoz, Les Molloy, su cuerpo será trasladado a Londres donde será enterrado en el Highted Cementery, cercano al lugar donde McLaren nació.