Daft Punk en Chile
Foto por newdisco

Al grano: aunque pueda sonar contradictorio, la persona que no compró su entrada para esta primera noche del Santiago Urbano Electrónico 2006 (SUE), puede revolcarse en el suelo o lanzarse al vacío. Por otro lado los que sí asistieron al Espacio Riesco quedaron con una sensación bastante extraña – por no decir gusto a poco – al terminar el show.

El puntapié inicial lo dio el dúo local Marciano – con Nicole incluida – quienes a pesar de los esfuerzos desplegados sobre el escenario, siguen sin llenar ese vacío que separa a las “bandas” de las “grandes bandas”. O sea, todavía no existe el registro musical potente que llame realmente la atención en sólo treinta minutos. Esto no quiere decir que estuvieron pésimos porque cumplieron con todas las expectativas, pero cualquiera que estuviese adelante sería opacado, sobre todo si después siguen Dj Shadow y Daft Punk, dos monstruos de la electrónica mundial.

Cuando apareció Dj Shadow muchos se sorprendieron. Primero porque nadie esperaba una performance con tanta onda, ritmo y buena química con los asistentes, centrado básicamente en un hip hop instrumental, mucho scratch sobre base electrónica y un MC de acompañamiento, que se las ingenió para hacer participar al público, fueron la tónica que marcó increíble presentación del californiano.

Luego vino el turno del plato de fondo. Daft Punk pegó un batacazo directo desde el inicio. “Robots rock??? abrió los fuegos y de ahí los franceses no pararon más. Sumergidos dentro de una pirámide, desde donde hicieron bailar hasta a los más tiesos (entre los que me incluyo), la dupla de robóticos desplegó una serie de hits como ‘Technologic’, ‘One more Time’, ‘Da Funk’, Face to face’ o ‘Around the world’, resumiendo elegancia, talento y mucho electro. En poco más de una hora generaron un futurístico paisaje, potenciados por un deslumbrante juego de luces, tres pantallas gigantes y efectos varios.

El cierre fue abrupto dejando a muchos con la sensación de que los parisinos no se habían despedido definitivamente. Pero la fiesta a esa altura ya había terminado. No queda más que recordar para los que tuvimos la suerte de ver a Daft Punk en Chile, por todo el despliegue que mostraron y por la leyenda en que se trasformaron.

Nos vemos para el día Sábado.